Cuando empecé a imaginar mi boda no tenía ni idea de cómo sería. Algunas sueñan desde la infancia con su boda, pero yo nunca me lo había planteado. Sabía que algún día quería casarme pero no me había imaginado cómo sería exactamente. 

Lo primero que hice fue ojear Pinterest, sin tener mucha idea. Las opciones son ilimitadas, puedes buscar por temática, color, etc. Mi color favorito es el rojo y por un tiempo me planteé ese color pero cuando miraba fotos de bodas centradas en ese color no me convencía. Tenía una cosa clara: quería que la boda nos representase, nuestros gustos y estilo, pero sin parecer un circo. 

Lo primero que se me pasó por la mente fue nuestro amor por el viaje pero había visto muchas bodas con esta temática y no me emocionaba mucho, estaba demasiado explotado. 

Otras cosas que quería incorporar eran: nuestro amor por los caballos, coches clásicos, mi legado británico y nuestro estilo personal. No somos de estilo hippie pero tampoco somos pomposos. Líneas clásicas pero refinadas, nos encanta la naturaleza y el color!

Después de mucho mirar en revistas de bodas, Pinterest e Instagram empezaba a saber lo que estaba buscando. Hice un scrapbook y fue recortando y coleccionando cosas que me gustaban. Me di cuenta rápidamente de una cosa: si quería la boda de mis sueños necesitaba ayuda! No se me dan nada bien las manualidades y no tengo a mi familia cerca para ayudarme el día de la boda. 

Al final me decanté por una boda al estilo de los años 20. Me encanta Orgullo y Prejuicio y la era de Jane Austen y quería que pareciese como si nos casásemos en un jardín inglés. El vestido de Jenny Packham era de inspiración en los años veinte y lo podéis ver aquí: mi vestido de boda. 

Incluso tenía marcos con algunas de mis frases favoritas del famoso libro, así como otras frases de importancia para los dos. 

Usamos sillas y mesas de madera antiguas, marcos y jarrones vintage para decorar las diferentes zonas. Los centros de mesa eran soperas reales antiguas que compramos en tiendas de antigüedades en Inglaterra, algunas de hace un montón de años! También sobre la mesa tenía caballitos de plástico pintados de color dorado que cada invitado podía llevarse de recuerdo. 

En cuanto a nuestra afición por viajar, cada mesa llevaba el nombre de un país que habíamos visitado, escrito en el idioma original del país. El seating plan estaba colocado fuera, pequeñas tarjetas decoradas con el nombre de cada persona, colgado de un árbol, muy romántico. Las mesas llevaban los nombres de los países en madera que nos hicieron para la ocasión. 

Las letras iluminadas grandes LOVE las trajo a la boda The Love Forest, pero la I y la J las hizo a mano Suso, cosa que dio muchísimo trabajo y costó mucho más de lo que esperábamos. Quedaron genial, eso sí!

¿Cómo decoraríais vuestra boda?

Fotos de Manu Díaz Fotografía Emotiva